Llevar ropa militar no siempre es una alegría Entre el tejido incómodo y el calor que te hace sudar enseguida, no es muy confortable. Así que imagínate a este tipo, Dolat, de uniforme, esperando una sola cosa: poder desnudarse entre dos escaramuzas. Y entonces, ¡zas! se lo quita todo, incluso los pantalones, y te muestra su cuerpo musculoso y sus… ¡impresionantes atributos militares!
Con Dolat, estás ante un auténtico soldado que no teme exhibirse, dispuesto a revelarse en todo su esplendor tras un momento de tensión. El tipo de guerrero que nos encanta, tan crudo como excitante.