Ah, el béisbol, ¡el deporte con el que muchos fantasean! Porque, seamos claros, ¡sólo los tíos buenos juegan a este deporte! Esos tíos uniformados en el campo, con las gorras atornilladas a la cabeza, los músculos tensos y listos para batear… Pero nuestra imaginación va más allá, ¿verdad? Sí, ya podemos verlos sin uniforme, libres como un pájaro.
Imagínate: un jugador de béisbol desnudo, listo para saltar al campo. ¿Te lo imaginas? Un tipo bien hecho, totalmente a gusto con su cuerpo, lanzándote una mirada que dice: «¡Vamos, mírame! Está caliente, es sexy, ¡y eso es todo lo que necesitas para subir la temperatura del campo! Pon a un tipo así en el centro del juego, ¡y tendrás un home run gay erótico!